Luna Lunera Cascabelera

Debajo la cama tienes la cena.
Es impresionante la cantidad de atributos humanos (y divinos) que le hemos ido asignando a la luna a lo largo de la historia. Creímos, y todavía muchos creen, que influye en las cosechas, en la fertilidad, en el equilibrio de la mente, en la mutación de especies, en el curso de las batallas, en alguna que otra catástrofe,...
Puede que sea uno de esos extraños recursos con los que cuenta el universo para mantener el equilibrio. Ella, girando permanentemente alrededor de la tierra, atraida por su mayor tamaño y sometida por la ley de la gravedad, solo encontró una forma de vengarse. Rodearse de misterio para cautivar a los pobladores del planeta que la mantenía cautiva.


La ciencia nos ha ayudado a entender muchas cosas de nuestro satélite como su composición, su tamaño, su distancia hasta nosotros o la forma de su órbita. Habrá quien se sienta defraudado porque eso le ha hecho perder su magia. Es cierto, el conocimiento desplaza a la magia y eso es bueno. Pero, en lo que a mí respecta, la sustituye por el asombro y eso es bastante mejor. Porque el asombro es un estado de ánimo que incita a seguir intentando comprender.


Llega el verano. Hay menos nubes. Después de un día caluroso, la noche trae algo de fresco y apetece disfrutarla. Como ha desaparecido la luz del sol, también se ha ido con ella el paisaje que iluminaba. Ahora, lo que llama nuestra atención, son esos miles de puntos brillantes en el cielo. Y es la luna la que adquiere en este escenario todo el protagonismo. Así, cada año me sorprendo mirándola y cada año la fotografío. Con la confianza de que esta foto será la mejor de todas porque es imposible que la haya mirado antes con tanta admiración como lo estoy haciendo ahora. Trampas que me hago. Si las fotos son algo mejores (tampoco estoy tan seguro de ello) será porque tengo un poco mejor equipo, algo más de oficio y unas cuantas experiencias fallidas.
De las fotos que voy a mostrar, la mayoría ya habían sido publicadas en este blog. Algunas como imagen única de un artículo. Otras formando parte de una colección. Hay sin embargo dos que no fueron nunca publicadas ya que, cuando se tomaron, no existía todavía este blog o porque en su momento no me pareció oportuno. Hoy me apetece convocarlas y reunirlas a todas en una especie de álbum que, de alguna manera, recorre el devenir fotográfico de su autor.
La que abre el artículo fue tomada el fin de semana pasado. Hasta la foto más "descriptiva" de la luna tiene una componente un tanto onírica. Puede que sea porque un teleobjetivo muy largo llega a donde no llegan nuestro ojo. O porque a partir de ese pequeño trozo iluminado nuestra mente, de forma inconsciente, construye el resto de la esfera que falta. O quizá porque nuestra imaginación calenturienta prefiere ir más allá y ver, suspendida en el negro cielo, una guadaña de luz blanca.

A veces, en la misma noche, separadas por un breve lapso de tiempo, coinciden dos circunstancias tan particulares que casi te sientes obligado a reunirlas (editando con el ordenador) en la misma foto. Un ave nocturna tan particular como el chotacabras y una luna tan bella merecen cantar a duo.


Esta es de los comienzos. Tiene algo de especial porque es la única de la serie que recoge una luna de invierno (está tomada en una fría noche de enero) y porque está hecha con el primer teleobjetivo que tuve y que hace ya mucho vendí.


La luna es un mal espejo. Su superficie se queda con gran parte de la luz que le llega del sol y refleja tan solo una pequeña parte. Es por eso que nuestros cualificados ojos la pueden mirar sin deslumbrarse al mismo tiempo que aprecian detalles mucho peor iluminados en la misma escena. Pero la cámara fotógrafica está mucho peor dotada que nuestros ojos en estas situaciones. Si exponemos para la luna el resto quedará completamente a oscuras. Y si exponemos para el resto, la luna se saldrá del rango de nuestro sensor. Hay que decidir y a veces es el entorno el que gana.


Cuando hay algo que te cautiva eres capaz de mantener la atención sobre ello durante periodos de tiempo muy largos. De esa manera descubres que también la luna, en determinadas circunstancias, cuando desciende hacia la línea del horizonte, puede perder mucha de su luminosidad y adoptar un tono que va pasando del blanco al amarillo y que, por unos breves instantes, llega hasta el rojo. Es ahí donde su luz se equilibra con la del paisaje nocturno y puedes conseguir con un solo disparo (sin montajes posteriores) una foto como esta.


Y como para cada problema hay una solución, también puedes ajustar los parámetros de tu cámara para que la luna quede bien expuesta y compensar la subexposición de lo que tienes en un plano cercano con un golpe de flash.


Con una foto similar a la que empecé termino. Me gusta la simetría en el relato.
Qué de cosas se descubren cuando "necesitas" meter en tus fotos aquello que te cautiva. Investigas y pruebas infinidad de maneras. Si no se te ocurre nada, siempre te queda el recurso de "atraerlo" hacia ti con un potente teleobjetivo y con un generoso recorte en el fotograma. Los que miramos la foto nos sorprenderemos siempre al descubrir una luna nueva (no me refiero a una de sus fases). Diferente a la que somos capaces de observar a simple vista.


Para compensar un poco el tono de cuento que ha acabado tomando este artículo, os pongo los datos exif de las fotos. Expresan con gran precisión cómo se tomó cada fotografía y va también implícito en ellos  el "estilo" del fotógrafo.

Todas fueron hechas con la cámara sobre trípode. En todas veréis que la velocidad es insuficiente para disparar a pulso y conseguir una foto no trepidada y bien enfocada. Con el paso del tiempo he ido colocando el trípode en una posición cada vez más baja y con las patas más abiertas. No puedo demostrar que ese plus de estabilidad influye en la calidad de la foto pero estoy convencido de que así es, sobre todo cuando se están utilizando focales tan largas y fotografiando objetos a tanta distancia.
Hay una característica del disparo que no recogen los exif y estoy seguro que se ha utilizado en casi todas. Dos segundos de retardo tras la pulsación del botón de disparo (para evitar temblores en la cámara) y otros dos más tras la elevación del espejo (por la misma razón).

Fecha: 20/06/2015  23:56
Modo exposición: Manual
Vel: 1/15 s
f:9
ISO: 400
Focal: 200 x 2 (duplicador) = 400 mm. Equiv. en 35 mm: 800 mm.
Enfoque: Manual


Ya os he explicado que esta imagen está montada a partir de dos fotografías. Como lleva bastante trabajo de edición los datos exif de ambas se contaminan mucho. Una pequeña explicación de cómo se tomó en el artículo original.

Fecha: 15/01/2011  23:40
Modo exposición: Manual
Vel: 1/60 s
f:11
ISO: 100
Focal: 277 mm. Equiv. en 35 mm: 544 mm.
Enfoque: AF


Fecha: 19/06/2011  00:39
Modo exposición: Manual
Vel: 1/1.6 s.
f:5
ISO: 400
Focal 200 mm. Equiv. en 35 mm: 400 mm.
Enfoque: Manual


Fecha: 15/08/2013  01:09
Modo exposición: Manual
Vel: 3.2 s
f:6.3
ISO: 400
Focal: 200 mm. Equiv. en 35 mm: 400 mm
Enfoque: Manual


Fecha: 13/05/2014  21:48
Modo exposición: Manual
Vel: 1/60 s
f: 7.1 Flash externo activado por radio.
ISO: 200
Focal: 50 mm. Equiv en 35 mm: 100 mm.
Enfoque: Manual


Fecha: 14/07/2013  23:24
Modo exposición: Manual
Vel: 1/6 s
f:9
ISO: 100
Focal: 200 mm. Equiv en 35 mm: 400 mm
Enfoque: Manual

2 comentarios:

  1. Me ha gustado mucho tu articulo y me ha parecido muy agradable de leer.
    Quisiera hacerte un comentario: dices que el conocimiento desplaza la magia. Imagino que te refieres al pensamiento irracional y ahi estoy de acuerdo, pero creo que magia tiene una acepcion mas: maravilla o encanto de algo. Y precisamente el conocimiento aporta la magia (esa magia) de lo real.

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    1. Gracias por tu comentario Asier. Es exactramente como dices y además así lo he tratado de expresar aunque suele pasar que, cuando se habla de estos temas, las palabras pueden ser un cúmulo de sobreentendidos dependiendo de quién las diga y quién las escuche.
      Cuando digo "magia" me refiero a tu "pensamiento irracional" o pensamiento mágico. Y cuando dices "maravilla o encanto" yo he utilizado "asombro".

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